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Por: Thomas Watson.
Este artículo forma parte de la serie: Todo obra para bien.
El pecado, en su propia naturaleza, es condenable; pero Dios, en Su infinita sabiduría, lo anula, y hace que el bien surja de aquello que parece oponerse más a él. En verdad, es una maravilla que alguna miel salga de este león. Podemos entenderlo en el siguiente sentido.
Los pecados de otros son anulados para bien de los piadosos. No es un pequeño problema para un corazón bondadoso vivir entre los impíos. «Ay de mí, que habito en Mesec>> (Salmo 120:5). Sin embargo, incluso esto, el Señor lo convierte en bien. Los pecados de otros obran para bien de los piadosos, pues producen santo dolor. El pueblo de Dios llora por lo que no puede reformar. <<Ríos de lágrimas corren por mis ojos, porque no guardan tu ley» (Salmo 119:136). David lloraba por los pecados de los tiempos; su corazón se convirtió en un manantial y sus ojos, en ríos. Los hombres malvados. se alegran con el pecado. <<Porque en tu maldad te gloriaste» (Jer. 11:15).
Pero los piadosos son palomas que lloran; se afligen por los juramentos y las blasfemias de la época. Los pecados de los demás, como lanzas, atraviesan sus almas. Este dolor por los pecados de los demás es bueno. Muestra un corazón infantil, resentir con dolor las injurias hechas a nuestro Padre celestial. También muestra un corazón como el de Cristo. <<<Se entristeció por la dureza de sus corazones» (Marcos 3:5). El Señor se fija especialmente en estas lágrimas. Le agrada que lloremos cuando Su gloria sufre. Tiene más gracia llorar por los pecados de los demás que por los nuestros. Podemos afligirnos por nuestros propios pecados, por temor al infierno; pero afligirnos por los pecados de otros, es por un principio de amor a Dios. Estas lágrimas caen como el agua de las rosas: son dulces y fragantes, y Dios las pone en Su frasco. «Mis huidas tú has contado; pon mis lágrimas en tu redoma; ¿no están ellas en tu libro?» (Salmo 56:8)
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*Thomas Brooks (1608-1680): Predicador congregacional; autor de Preciosos remedios contra las artimañas de Satanás (Precious Remedies against Satan’s Devices). Lee más datos biográficos EN ESTE ENLACE.
