Por: F.B. Meyer*.
Este artículo forma parte de la serie: «120 meditaciones de F.B. Meyer«
«Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.» Gálatas 5:16
En el camino de la vida, tenga cuidado dónde pone los pies. Elija los caminos en medio de los peligros del mundo. Cíñase su túnica con cuidado, para que no se manche con la suciedad de la calle. Tenga cuidado con cualquier desvío que llevaría sus pasos lejos del camino angosto. Mire y ore. Especialmente, procure convertir cada momento – en una oportunidad de progresar en la vida divina. Ponga atención a los momentos, y las horas pondrán atención a sí mismas.
Sin embargo, todos estos requerimientos nos confundirán y tropezaremos en el camino, a menos que los mezclemos con el pensamiento de que Dios quiere caminar con nosotros. Él dijo: «Habitaré y andaré entre ellos» (2 Cor. 6:16). Permanezca en Dios, y Dios permanecerá en usted, juntos en cada paso y cada kilómetro del camino.
Reflexión: Al recordar su vida, ¿qué «desvíos» ha tomado? Piense en cuánto le ama Dios y anhela acercarlo a Él, para guiarlo en su andar con Él. Pídale, sobre todas las cosas, que le dé un corazón deseoso por conocerlo más a Él.
*Frederick Brotherton Meyer, un contemporáneo y amigo de D. L. Moody y A. C. Dixon, fue un pastor bautista y evangelista en Inglaterra involucrado en el ministerio y el trabajo misionero en el centro de la ciudad en ambos lados del Atlántico.