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Por: Teología Sana
Lectura Bíblica: “Porque por fe andamos, no por vista” – 2 Corintios 5:7
La fe es la base de nuestra relación con Dios. No se trata solo de creer en Su existencia, sino de confiar plenamente en Su carácter, Su bondad y Su soberanía. Vivimos en un mundo lleno de incertidumbres, pero la fe nos recuerda que no caminamos solos ni dependemos de nuestras circunstancias visibles. Andamos por fe, confiando en el Señor que va delante de nosotros.
A menudo nos encontramos con situaciones que parecen imposibles de superar. Tal vez sea un desafío financiero, una crisis familiar o una batalla emocional. En esos momentos, es fácil caer en el desánimo y dudar del poder de Dios. Pero Jesús nos enseñó que incluso una fe tan pequeña como un grano de mostaza puede mover montañas (Mateo 17:20). ¿Por qué? Porque nuestra fe no está en lo que podemos hacer, sino en lo que Dios puede hacer.
Hoy, Dios te invita a confiar en Él, a descansar en Su fidelidad. No importa cuán grande sea la montaña frente a ti, recuerda que tu Dios es más grande. Aun cuando no veas el camino, Él ya lo ha trazado. Cuando todo parezca perdido, tu fe será el ancla que te mantendrá firme.
Reflexión: ¿Hay alguna área en tu vida donde tu fe esté siendo probada? Pídele al Señor que fortalezca tu confianza en Él. Recuerda que el Dios que creó el universo te ama y está contigo en cada paso.
Oración: Señor, en medio de las pruebas y dificultades, ayúdame a caminar por fe y no por vista. Te entrego mis preocupaciones y confío en que Tú estás obrando en mi vida, incluso cuando no puedo verlo. Fortalece mi fe y recuérdame que nada es imposible para Ti. Amén.
Hoy, elige caminar en fe, sabiendo que Dios es fiel y está a tu lado en cada paso.
Gracias a Dios que es fiel a su palabra. No hay dudas que cuando menos esperamos él está a nuestro lado y miramos sus bendiciones y misericordia.
Que Dios los bendiga y les conceda palabras y sabiduría para seguirnos guiando.