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En muchos matrimonios de hoy en día, uno de los problemas clave es la comunicación. Y, en términos estereotipados, a menudo se atribuye al marido el problema de comunicación.

Pero los hombres no son los únicos con problemas de comunicación. Hay muchas cosas que las mujeres necesitan de sus maridos, pero no saben cómo articularlas, o dudan en preguntar por la tensión que temen que les produzca la pregunta.

Recientemente, se preguntó a más de 200 mujeres: ¿Qué necesita de su marido, pero no sabe cómo pedírselo?

He aquí las cinco respuestas más frecuentes:

1. Afirmación verbal

Una mujer puede saber que es la mujer más querida en la vida de su marido, pero para ella es importante oírlo.

«Sigo necesitando saber que le gusta mi aspecto y que me sigue apreciando», dijo una de las mujeres encuestadas.

Otra forma en que las mujeres necesitan afirmación verbal es que sus maridos reconozcan lo mucho que ellas contribuyen a la familia, ya sea a través del trabajo, las finanzas o quedándose en casa con los niños.

Las mujeres perciben cuando sus maridos hacen algo para expresarles su aprecio. Pero para muchas de las encuestadas, las palabras se llevan la palma. Una mujer lo explicaba así: «Creo que muchos hombres intentan decirlo sin palabras, pero sabemos que hay poder en las palabras«.

2. Atención plena

Todo el mundo -independientemente de su posición en la vida- tiene distracciones. A los niños se les suele atribuir el mérito de ser los que se dejan seducir por la tecnología, pero cada vez ocurre más lo mismo con los adultos.

Al final de un largo día, la tendencia es llegar a casa y desconectar. Pero se ha demostrado que este es un momento crucial para la comunicación conyugal, un momento para escuchar sin interrupciones.

«Como esposa, necesito tiempo sin televisión -solos los dos-, ya sea dando un paseo, haciendo un crucigrama, sentados en el patio o orando juntos«, dice una esposa. «Necesito sentir que soy más importante que los deportes o el trabajo«.

Para muchas de las esposas encuestadas, el contacto visual dice más que «te estoy escuchando». También dice: tú eres valiosa. Una de las esposas lo explicó de esta manera: «¡Creo que el contacto visual es fundamental para una pareja! Construye intimidad, confianza y le permite a una esposa saber que su día y sus actividades no ocurren en una burbuja. El contacto visual dice: ‘Me importas lo suficiente como para darte el tiempo y la atención que mereces, tanto como persona como cónyuge'».

3. Tiempo a solas

Un término muy popular hoy en día es la «culpa de mamá», y con razón. Alrededor de un tercio de las esposas que respondieron necesitan tiempo a solas, pero se sienten culpables al pedirlo. La mayoría explicó que si sus esposos facilitaran su tiempo de soledad, probablemente se sentirían menos culpables e incluso se sentirían renovadas por ese tiempo a solas.

El tiempo a solas es difícil de conseguir, especialmente para las esposas en plena crianza de sus hijos.

«Y no solo en el baño«, agregó en tono de broma una esposa. «Y seamos realistas: con los pequeños, eso puede que ni siquiera sea posible».

Cuando un esposo facilita este tiempo a solas para su esposa, ella necesita saber que él la apoya totalmente en buscar estos momentos de descanso.

«Creo que las mujeres se sienten culpables cuando se alejan de sus familias. Necesitamos poder ausentarnos y saber que nuestras parejas y nuestros hijos están felices de que tengamos tiempo a solas», dijo una de las mujeres. «Algunas mamás, como yo, somos introvertidas y tenemos la misma necesidad que los introvertidos que no son padres. No solo queremos estar solas, necesitamos estar solas».

4. Romance

Probablemente, no sea una sorpresa, pero la encuesta demuestra que la necesidad de romanticismo de las mujeres no es solo un estereotipo, sino una realidad.

La mayoría de las mujeres que dieron esta respuesta dijeron que no solo necesitan una cita nocturna, sino que sus maridos hagan parte de la planificación. Dado que muchas de las actividades familiares y los asuntos del calendario recaen sobre los hombros de las esposas, explican que sería un gesto bien recibido si sus maridos se acercaran a ellas con algunos planes para el fin de semana y una niñera concertada de antemano.

«Es agradable cuando ocurre así, porque ha sido idea suya y no parece que yo esté intentando controlarlo todo«, dice una esposa.

5. Ayuda

«Si los hombres se ofrecieran a ayudar sin que la mujer se lo pidiera, sería increíble«, dijo una de las esposas encuestadas.

De forma abrumadora, la respuesta más popular en la encuesta fue «ayuda», en varias formas. Tanto si se trata de intervenir para hacer cosas que generalmente se consideran «cosa de mujeres», como cocinar y limpiar, como de ayudar en las decisiones cotidianas, en las soluciones disciplinarias para los hijos o incluso en los dilemas con los amigos, las mujeres que dieron su opinión expresaron claramente que anhelan la participación de su marido.

Cambiar un pañal, cargar el lavavajillas, poner la mesa, guardar la ropa, hacer cualquier cosa de mi lista diaria sin que me lo pidan. Esto demuestra que entiende lo que hago a diario y me muestra que se da cuenta de lo que estoy haciendo. Me hace sentir apreciada”, dijo una madre abrumada con niños pequeños.

Otra mujer explicó que puede resultar abrumador incluso pedir ayuda, y que los hombres deberían entender por qué a veces parece que están regañando, en lugar de pidiendo: Tu mujer necesita tu ayuda: con los niños, con las tareas domésticas, con las decisiones de la vida, con lo que hay que preparar para cenar». A menudo, la mujer se esfuerza por hacer «su trabajo» mientras el marido hace «el suyo». Y en lugar de pedir ayuda cuando se siente abrumada, se limita a seguir adelante, hasta que ya no puede más. Entonces, una simple petición de ayuda se convierte en un regaño».

La mayoría de las esposas que también fueron madres creen que el papel de los padres es igualmente crucial. Y cuando un padre echa una mano y se implica más en las actividades cotidianas y las necesidades de sus hijos, comunica a su mujer que comprende la importancia de su papel.

«Como mujeres, a menudo sentimos que es ‘nuestro trabajo’ atender todas las necesidades de nuestros hijos«, explica una de las esposas. «Cuando, en realidad, el papel del hombre en la vida de un niño es muy importante».

Muchas esposas esperan con impaciencia que sus maridos satisfagan sus necesidades, pero nunca las verbalizan, y se enfadan y resienten cuando no se satisfacen. Al mismo tiempo, los maridos no son conscientes de las necesidades de sus esposas, y se confunden y enfadan cuando sus esposas actúan despectivamente hacia ellos.

Conocer las cinco principales necesidades de las esposas ayudará a los maridos a comprender mejor a sus esposas e interactuar mejor con ellas. Lo mismo puede decirse de las mujeres que explican sus necesidades a sus maridos. Comunicar sus necesidades a su cónyuge es clave; si su cónyuge no conoce sus necesidades, seguramente no serán satisfechas.

Publicado originalmente en inglés aquí.


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