Este artículo forma parte del devocional «El lugar apacible«
Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia (2 P. 1:3).
CUANDO LEO “NOS HAN SIDO DADAS”, pienso en alguien que recibe una beca para ayudarle a costear sus estudios universitarios. Es un regalo. No tiene que devolverlo. O pienso en un investigador que solicita el patrocinio de un proyecto prometedor a una fundación. Si aprueban su solicitud, le dan una beca para utilizar en ese programa o emprendimiento. Y aunque los de la fundación querrán saber cómo se utiliza su dinero, no consideran su inversión como un préstamo. Es un regalo: una beca.
Dios nos ha dado, a sus hijos redimidos, magníficos regalos “por su divino poder”. Él tiene la plena capacidad y todos los recursos para hacerlo. Y a diferencia de una beca de estudios o una beca caritativa, que podrían no ser suficientes para cubrir todas las necesidades de una persona, el generoso regalo de Dios cubre “todas las cosas” que son necesarias para tener una vida piadosa y de total adoración, y para poner en práctica su Palabra.
Ahora tenemos todo lo que necesitamos para la salvación, todo lo que necesitamos para la santificación, todo lo que necesitamos para cada paso, cada etapa, cada lucha y dificultad de la vida.
¿Dices que necesitas poder para ser más paciente y disciplinado? Lo tienes. ¿Necesitas el deseo de ser más atento y considerado? Lo tienes. ¿Necesitas los recursos y la habilidad para no dejarte abrumar por el temor, el desaliento y la duda? Los tienes. Todas estas cosas “nos han sido dadas” para que “llegase[mos] a ser participantes de la naturaleza divina” (2 P. 1:4).
¿De qué otra manera vivirías cada día si realmente creyeras que Dios ya te ha dado todo lo que necesitas para dominar tu propia naturaleza pecadora? ¡Dale gracias por su divino poder y su gracia!
*Nancy Leigh DeMoss es una autora y predicadora cristiana estadounidense. A la vez es anfitriona de los programas de radio Revive Our Hearts («Aviva Nuestros Corazones«)