Por: Octavius Winslow (1808 –1878)
«Partícipes de la herencia de los santos en luz». Colosenses. 1:12.
Los santos glorificados son «los santos en luz». No más velos del semblante del Padre, no más «andar en tinieblas, sin luz», no más lamentos por las deserciones divinas, las suspensiones del amor experimentado del Padre, no más lágrimas que oscurezcan los ojos, no más nubes de incredulidad que oscurezcan la mente, no más abatimiento mental que envuelva el espíritu; dejan atrás la penumbra, la niebla y las tinieblas de la ignorancia, el error y la contaminación, y huyen a las regiones de la luz, a «la herencia de los santos» de la cual «el Cordero es la luz». «
Pero se observará que se dice que estos santos glorificados son «partícipes de la herencia». Hay algo muy enfático en la palabra. Somos «partícipes» de ella ahora, en Cristo nuestra Cabeza. Como consecuencia de nuestra unión a Cristo, la exaltada Cabeza de la Iglesia, somos actualmente «partícipes» de esta herencia. Tenemos los primeros albores de ella en nuestra alma: el anticipo y el antepasado, y, lo que es mejor de todo, la morada del Espíritu, que es las arras de su posesión; y si tenemos las «arras» de la herencia en la posesión del Espíritu, debemos tener, y con seguridad tendremos, la herencia misma.
«Partícipes de la herencia de los santos en luz». «Partícipes» con todos los santos de Dios; «partícipes» con toda la familia de los elegidos; «partícipes» con todos los hijos de adopción; «partícipes» con Abraham, Isaac y Jacob; con David y Salomón, y con todos los que nos han precedido, con todos los que han entrado en el cielo un poco por adelantado; y «partícipes» con todos los «rescatados del Señor», que aún «vendrán a Sión con cánticos, y gozo eterno sobre sus cabezas, obteniendo alegría y regocijo, huyendo su tristeza y sus suspiros». » Oh, ¿quién no sería «partícipe de la herencia de los santos en luz»? Lector, si eres un humilde poseedor de la vida interior, serás un feliz partícipe de esta gloriosa herencia: la vida venidera.
*Octavius Winslow (1 agosto 1808-5 marzo 1878), también conocido como “El compañero del peregrino”, se destacó como uno de los predicadores evangélicos más destacados del siglo 19 en Inglaterra y América. Un Ministro Bautista, ministro durante la mayor parte de su vida y contemporáneo de Charles Spurgeon y J.C. Ryle
