No olvides compartir con tus amigos ....

Por: John MacArthur

Este artículo forma parte de la serie de devocionales «Fortaleza para hoy»

«Andad… con toda… mansedumbre». EFESIOS 4:1-2

Jesús es el mejor ejemplo de gentileza. Se enojaba cuando Dios Padre era deshonrado, pero no cuando lo era Él, el Hijo.

Jesucristo es nuestro ejemplo supremo de gentileza. Pablo se refiere específicamente a ello en 2 Corintios 10:1. El propio Jesús dijo de sí mismo: «Soy manso [gentil] y humilde de corazón» (Mateo 11:29).

Jesús mostraba indignación cuando era apropiado, pero era una ira oportuna. Cuando descubrió que el templo estaba lleno de gente que vendía animales para el sacrificio a precios exorbitantes, los expulsó, derribando las mesas con todo y el dinero de los mercaderes (Mateo 21:12). Él les dijo: «Escrito está: Mi casa, casa de oración será llamada; mas vosotros la habéis hecho cueva de ladrones» (v. 13). Luego, les dijo a los escribas y fariseos: «¡Serpientes, generación de víboras! ¿Cómo escaparéis de la condenación del infierno?» (23:33). No se quedó de brazos cruzados mientras profanaban el templo. Pronunció juicio contra los hipócritas que blasfemaban a Dios.

Aunque Jesús se enojaba cuando blasfemaban a Dios, no tomaba represalias ni condenaba a los que lo atacaban. «Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas … cuando padecía, no amenazaba, sino encomendaba la causa al que juzga justamente» (1 Pedro 2:21-23). Cuando el templo de Dios fue profanado, Jesús lo limpió. Pero cuando el templo de su cuerpo fue mancillado, soportando la agonía de la cruz, con burladores por todos lados, todo lo que dijo fue: «Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen» (Lucas 23:34). Esa es la gentileza suprema, el desapego total.

Es muy fácil contraatacar cuando alguien nos critica o nos agrede, pero esa no es la forma en que el cristiano —que tiene gentileza— emplea para tratar de caminar con dignidad. El único momento en que debemos dejar que el león que llevamos dentro ruja, es cuando la honra de Dios está en juego. Jesús perdonó a aquellos que lo crucificaron. ¿Cómo podemos hacer menos a los que nos hieren?

Sugerencias para la oración: Todos fallamos en seguir el ejemplo de gentileza que Cristo da. Ore para que Dios le ayude cada día a reflejar más y más la gentileza de Cristo.

Para un estudio más profundo: Lea el relato del arresto y la crucifixión de Cristo en Mateo 26:47 al 27:50. ¿Tenía Jesús poder para devolver el golpe (26:53)?

Encuentre todas las instancias en las que Cristo mostraba su gentileza.

ARTÍCULO DE INTERÉS: Cómo disfrutar el contentamiento – John MacArthur


Un comentario en «<strong>Cristo, ejemplo de gentileza – John MacArthur</strong>»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *