Por: D. L. Moody*
1 Pedro 5:8: Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;
La razón por la que muchos cristianos fracasan durante toda la vida es esta: subestiman la fuerza del enemigo. Querido amigo, tienes un amigo terrible con el que pelear. No permitas que Satanás te engañe. A menos que estés muerto espiritualmente, tendrás lucha. Casi todo lo que nos rodea tiene la tendencia a apartarnos de Dios. No salimos de Egipto directamente hacia el trono de Dios. Tenemos que caminar por el desierto, y hay enemigos en el camino.
Que ningún hombre o mujer piense que todo lo que tiene que hacer es unirse a la iglesia. Eso no te salvará. La pregunta es ¿Estás venciendo al mundo o el mundo te está venciendo a ti? ¿Tienes más paciencia que hace cinco años? ¿Eres más amable? Si no lo eres, el mundo te está venciendo, aunque seas un miembro de la iglesia. La epístola que Pablo escribió a Tito dice que hemos de tener paciencia, fe y misericordia. Tenemos cristianos, una buena cantidad de ellos, que son buenos en ciertos puntos, pero muy pobres en otros. No son redondos en su carácter, y eso es simplemente porque no se les ha enseñado que tienen un terrible enemigo que vencer.
Si quisiera saber si un hombre es cristiano, no iría a preguntar a su pastor. Le preguntaría a su esposa. Necesitamos más piedad en los hogares de inmediato. Si un hombre no trata a su esposa adecuadamente, no le quiero escuchar hablar de cristianismo. ¿Qué sentido tiene hablar de salvación en la próxima vida si no se tiene salvación para esto? Queremos un cristianismo que entre en nuestros hogares y en nuestras vidas diarias.
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*Dwight Lyman Moody fue una de las figuras más importantes del evangelicalismo moderno.
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