Feminismo, deconstrucción e ideología de género: la nueva agenda de la UNESCO para la educación

Por: Teología Sana

Creada en 1945 para garantizar la protección del patrimonio cultural de la humanidad, la UNESCO, oficialmente la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, ha adoptado una posición cada vez más política y ha respaldado una agenda progresista en las escuelas. Y una publicación recientemente publicada por el organismo refuerza esta tendencia.

Fue en París en donde por varios días distintos países aprobaron una declaración sobre las mejoras que debe haber en el sistema educativo a nivel mundial, pidiendo no solo a los países que apoyaron el plan sino a otros más a que se haga realidad a nivel internacional.

Bajo el eslogan “Reimaginando nuestro futuro juntos”, estos objetivos deberían alcanzarse mucho antes de lo pautado, que sería para el año 2050, donde se promoverán “cambios radicales” en todo el mundo en base al modelo de educación que desean construir.

Según las palabras de la UNESCO, este sería “un nuevo contrato para la educación”, pero en vez de mostrar el esfuerzo en mejorar la calidad del aprendizaje, es una compilación crítica hacia “el patriarcado” y una exaltación del feminismo radicalizado como se ve en la actualidad.

Desde 2015, la UNESCO también es responsable del desarrollo y seguimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, también conocidos como la Agenda 2030.

Los puntos más llamativos a tocar en este nuevo currículum educativo abarca lo siguiente:

• La ideología de género: “La pedagogía de la solidaridad debe basarse en una educación inclusiva e intercultural, que considere todas las formas de discriminación y segregación, incluida la identidad de género”.
• El Patriarcado: “Los efectos generalizados del patriarcado, el sistema ideológico mediante el cual los hombres reciben la mayoría de los derechos y el poder sociales, continúan informando los mensajes y patrones de pensamiento que se transmiten a los niños y jóvenes en la sociedad y en las escuelas. Los roles de género opresivos y la discriminación de género son perjudiciales para todos en la sociedad”.
• El Femnismo: “Podemos reinventar los planes de estudio para incluir conversaciones intergeneracionales sobre prácticas de conocimiento que son relevantes para la vida en el planeta, como las que ocurren en varios movimientos y comunidades liderados por jóvenes. Los planes de estudio deberían permitirnos volver a aprender cómo estamos interconectados con un planeta vivo dañado. Las perspectivas feministas y las voces indígenas tienen mucho que contribuir a navegar este momento crucial”.

Además de estos puntos, se usó el término “Aprender a desaprender”, con la finalidad de destruir las tradiciones culturales e introducir la ciencia etnocéntrica que simboliza “la no neutralidad”; otros puntos fueron el racismo y el cambio climático.

Los nuevos planes de muchas organizaciones o entes de gran poder en el mundo desean introducir forzadamente la igualdad de género así como su ideología y el supuesto empoderamiento femenino que termina en una idea tan radical que apoya el aborto y la introducción de la comunidad LGBT en la sociedad.

Por ello, es momento de tener aun mucho más cuidado con lo que nuestros niños y jóvenes están siendo formados en las instituciones, a fin de que no puedan deformar la idea que ya sido preestablecida sobre la sociedad, la cual viene formada por valores espirituales y una mentalidad alineada al propósito de Dios para Su creación.

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