Por: Paul Washer
De los pasajes de las Escrituras que estudiamos en este capítulo, podemos afirmar las siguientes verdades acerca de Dios.
1. Dios es uno. No hay tres diferentes dioses en la Trinidad, una herejía llamada Triteísmo.
2. Dios es tres. Un Dios que existe como tres personas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
3. Las Escrituras claramente confirman ambas verdades: Dios es uno, y Dios es tres.
Aunque no podemos comprender a cabalidad cómo puede ser esto, debemos creer y enseñar ambas verdades con la misma convicción. Es una herejía (o sea, falsa doctrina) cuando afirmamos una verdad pero negamos la otra, o enfatizamos una verdad sobre la otra. Debemos asirnos de toda la verdad igualmente y evitar todos los extremos.
4. Las tres personas de la Trinidad son personas reales y distintas. La Trinidad no es una sola persona que usa tres máscaras diferentes o que se revela a sí misma de tres formas o modos diferentes, esa es una herejía llamada “modalismo”.
5. Las tres personas de la Trinidad son perfectamente iguales. El Hijo no es menos que el Padre, ni el Espíritu es menos que el Hijo.
6. Las tres personas de la Trinidad pueden manifestarse de diferentes maneras y desempeñar funciones distintas. Ningún hombre ha visto al Padre; el Hijo se hizo carne y habitó entre nosotros; el Espíritu mora en cada creyente en Cristo.
7. El misterio de la Trinidad no es una razón para negarla. Algunos dirán que es imposible creer lo que no pueden entender y que, si algo no se puede explicar, no puede ser cierto. Si aplicáramos esa misma lógica a toda la Biblia o aun a nuestra propia existencia, entonces quedaría muy poco en qué creer. Aun las verdades más simples de las Escrituras y de la realidad humana van mucho más allá de nuestro entendimiento. Nuestra fe no se basa en nuestro entendimiento, sino en el testimonio verdadero de las Sagradas Escrituras.
8. La mayoría de las ilustraciones que se emplean para explicar la Trinidad son lastimosamente inadecuadas. Con frecuencia, los estudiosos de las Escrituras han empleado diversas ilustraciones en un intento por explicar la Trinidad. Lamentablemente, estas ilustraciones hacen más daño que bien. Por ejemplo, la Trinidad a veces se compara con el agua, que existe en tres formas diferentes: líquido, hielo y vapor. Tal ilustración es una distorsión de la Trinidad, pues sugiere que Dios es una persona que toma tres formas diferentes (una herejía llamada modalismo que mencionamos antes). Es mejor simplemente afirmar la unidad y trinidad de Dios sin explicaciones ni ilustraciones que son engañosas o incluso heréticas.
Tomado del libro del Pastor Paul Washer titulado “Conociendo al Dios vivo” pág. 29 -30 de la versión digital.
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Me gustaría estudiar la palabra de Dios, pero solo hablo en español. Gracias!!
Caminamos por fé y no por vista Dios padre Dios hijo y el espíritu Santo que mora en los creyentes como hijos de Dios y le adoran en espíritu y verdad amén